Los celos, esos tan conocidos que nos transforman en momentos clave, nos hace pasar de un lugar hermoso y neutral a uno despiadado en el que el perdón no existe y nos ofrece torturas como recompensa. Ese sentimiento que no nos deja pensar con claridad ni de manera objetiva. Todo porque antes de ese sentimiento estaba el amor, el cariño y la pasión. Pero lo hermoso dura poco y el destino aporta retos para comprobar cuán lejos llega nuestra constancia, la que no nos hace abandonar porque cuando realmente amamos algo lo que lo demuestra es que no nos rendimos así como así, luchamos porque sabemos que merece la pena. Y cuando luchamos por algo y no lo conseguimos a pesar de los esfuerzos, limpiamos nuestras conciencias sabiendo que hemos hecho lo que pudimos y que a lo mejor ese no era nuestro camino.
Tienes toda la razón, pero no todo lo hermoso dura poco. Que no siempre los celos van acompañados de pasión, que hay muchas clases de amor, que la amistad también lo es, y que yo crea la nuestra durará, y mucho, que por algo está ligada a la eternidad ; )
ResponderEliminarTe quiero, nunc et semper (L)
Un abrazo mon amour :)
Los celos, algo que nos destruye poco a poco a nosotros mismos y a las personas que más queremos. Aunque claro, también depende de cada persona y la clase de amor como ha dicho Madame Garburn.
ResponderEliminarMuackkkkkkk(L)
Hola! He visto tu Blog y es sencillamente genial
ResponderEliminarTe sigo, ¿Devuelves?
Besitos! ♥
Los celos es de lo peor.
ResponderEliminarMe gusta tu blog, te sigo! echas un vistazo al mío?? http://eire-designs.blogspot.com/